Trébol blanco, trébol rastrero – Trifolium repens

   Extensamente cultivada para formar hermosos y llamativos céspedes, y como planta forrajera, este conocido trébol se ha naturalizado en casi toda Europa, América y resto de continentes. En Asturias es muy abundante desde el nivel del mar hasta zonas de alta montaña.

   Pertenece a la familia de las leguminosas las cuales son capaces de fijar el nitrógeno del aire a través de una interesante simbiosis con bacterias Rhizobium que poseen en las raíces de la planta.

   Sus tallos tumbados apenas alcanzan los 40-50 cm, y poseen unos estolones que enraízan en los nudos por lo que se expanden con facilidad. De los tallos salen hojas alternas, pecioladas y compuestas por tres foliolos anchos, de ahí el nombre científico de ‘trifolium`. Estas hojas tienen forma ovada o elíptica, finamente dentadas, y con frecuencia con una marca lineal blanca en el haz. Los tallos floríferos no poseen hojas. Florecen desde abril-mayo hasta octubre.

   Al final de un largo pedúnculo se generan peculiares inflorescencias formando vistosas cabezuelas globosas de 30 a 60 flores, las que están marchitas dobladas hacia abajo, de color blanco aunque muchas veces teñidas con tonalidades rosadas a rojizas, y con cierta forma de tubo con alas.

   Cada flor suele dar una diminuta legumbre con tres o cuatro semillas. Es fácil encontrarla en pastizales y prados de siega, bordes de caminos, arroyos y fuentes, crece a plena luz y soporta la sombra.

   Para Irlanda el trébol tiene un significado especial, es uno de sus símbolos. La tradición dice que San Patricio utilizó las hojas del trébol para explicar a los irlandeses el misterio de la Trinidad, por este motivo cada 17 de marzo festejan su día grande con una hoja de trébol. 

   De manera casual puede encontrarse una planta de trébol blanco con hojas de cuatro foliolos, lo que según la tradición es un indicador de buena suerte. En la creencia popular a cada uno de los foliolos de la hoja del trébol se le asigna una cualidad o virtud, representando a la fe, esperanza y amor. Las hojas también se han utilizado como alimento en ensaladas, sopas y otras comidas cocinadas. Las hojas secas dan sabor a vainilla en pasteles y tartas.