Cuando nos encontramos con un conjunto floral de esta ´primula veris`, con todas las flores colgando hacia el mismo lado, nos damos cuenta de la espectacular capacidad creativa de nuestra naturaleza. Las flores se juntan formando umbelas y poseen un vistoso e intenso color amarillo con dos manchas anaranjadas en la garganta. Es un día especial.
Su cáliz es alargado y rematado en cinco picas, y la corola posee un largo tubo que finaliza en cinco lóbulos o pétalos. Florece desde febrero-marzo hasta junio.
Al igual que otras ´primulas` esta ´primavera` ha sido utilizada como planta medicinal y comestible desde hace muchos años. En algunos lugares está considerada como especie protegida, debido a la sorprendente amenaza de ser arrancada con mucha frecuencia.
Como la ´primula vulgaris`, llamada también ´primula acaulis`, está presente en toda la región asturiana, desde la franja costera hasta la alta montaña. Especialmente en claros y linderos de bosque, setos y zonas de pastos, praderías, taludes, …… Se encuentra desperdigada por casi toda la Península, más frecuente en el Norte.
Todas sus hojas forman una roseta basal, de cuyo centro brotan tallos derechos de unos 25 – 30 cm. de altura. Las hojas son ovaladas con nervios muy marcados, afinadas hacia el peciolo, y con el envés más claro y peludo.
La planta se utiliza en fitoterapia, contiene saponinas y es una solución eficaz para los dolores de cabeza pues tiene propiedades sedantes y relajantes. También se usa como diurética y depurativa. Buena como expectorante para atajar problemas de asma, catarros bronquiales o tos crónica, especialmente en casos de bronquitis crónica de las personas mayores.
Curiosamente las variedades cultivadas y ornamentales, existe una gran cantidad de híbridos, no presentan atributos curativos o medicinales. Entre ellos algunos poseen unos pelillos urticantes que pueden afectar alérgicamente a personas sensibles.
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