Se trata de una planta muy venenosa, con propiedades alucinógenas, que está incluida en la lista de plantas de venta prohibida por razón de su toxicidad. Posee diversos alcaloides que si se toman pueden provocar la muerte de la persona.
Está muy asociada al vudú y la brujería, pues los chamanes fumaban sus hojas junto con tabaco para entrar en trance. Toda la planta es tóxica, sobre todo semillas y hojas. Una pequeña cantidad de cuatro o cinco gramos de hojas son suficientes para matar a un niño.
Crece de forma natural en orillas de ríos, vertederos, escombreras, cultivos forrajeros,…… nitrófila o indicadora de nitrógeno. Despide mal olor y los animales no se acercan a ella. Tiene una enorme disposición para adaptarse a cualquier tipo de suelos, y por su fácil adaptación y capacidad de reproducción sigue unas claras pautas y conductas invasoras.
La planta, con un porte robusto, tallos cilíndricos, y abundantes hojas grandes, alternas, peciolos cortos, ovaladas y con bordes desiguales, llega hasta el metro de altura.
Las flores son grandes y solitarias, con cinco pétalos, de color blanco con tonalidades azules, y forman una especie de tubo o embudo. Florecen de junio a octubre. Al final se forma un fruto un tanto especial, del tamaño de una nuez con numerosas espinas, de donde salen gran cantidad de diminutas semillas negras.
Probablemente sea originaria de América del Norte o Centroamérica. Los indios ya conocían sus efectos, según la dosis provocaba alucinaciones, una fuerte embriaguez o la muerte por parálisis respiratoria. Usaban la planta en rituales y en actos de venganza.
Actualmente se cultiva con fines médicos para el tratamiento del asma, casos de violentos catarros bronquiales y otros, aunque únicamente en el marco de la industria farmacológica y con prescripción médica. Los envenenamientos de niños por ingestión de semillas de estramonio solían ser bastante frecuentes en algunas zonas.
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