Visitantes

sábado, 15 de febrero de 2025

Oruga de mar, rábano marítimo, ruca de mar - Cakile marítima

 

   Las dunas litorales son depósitos de arena de origen marino modelados por la acción del viento, se extienden a lo largo de la línea de costa formando valiosos ecosistemas que alojan una interesante biodiversidad, conformando un escenario de gran valor ecológico. Asomarse a las dunas de la costa asturiana en abril-mayo nos permite disfrutar de un sorprendente espectáculo floral.



   En la parte alta de las playas o arribazones marinos quedan depositados diversos materiales acumulados por las mareas vivas y temporales. Curiosamente en esta parte de la playa se forman lugares nitrogenados, ricos en materia orgánica, aquí ya podemos encontrar algunas plantas de ´oruga de mar`.


   A continuación entramos en las dunas primarias o embrionarias, donde se aprecia la acción del viento, son dunas inestables, móviles y en constante proceso de formación, pues aquí también localizamos numerosas comunidades de ´cakile marítima`, una de esas plantas que soporta bien la salinidad tanto ambiental como la del suelo por lo que suele crecer muy cerca de la orilla del mar.


   Puede alcanzar el medio metro de altura, con tallos que poseen ramas derechas y hojas carnosas, pecioladas y lobuladas, de aspecto muy dividido, con senos poco profundos. Las superiores menos fraccionadas.


   Sus flores blancas, rosáceas o lilas, con cuatro pétalos, se disponen en racimos. Poseen cuatro sépalos erectos y estrechos. Muestran cuatro estambres. Atesoran una floración muy abundante, podemos encontrarlas con flores durante casi todo el año, especialmente en los meses de primavera.



   Los frutos son alargados y gruesos, divididos en dos partes, y recuerdan una punta de flecha. Las semillas son muy ligeras para que pueden flotar en el agua del mar y ser transportadas largas distancias.


   Las hojas, tallos y flores son ricos en vitamina C, por lo que las plantas se pueden comer crudas o cocidas, pero tienen un sabor bastante amargo. Muy conocida y apreciada por los marineros de la antigüedad, resultaba muy útil y terapéutica para combatir el escorbuto. 


   En la actualidad no se emplean medicinalmente aunque fueron muy utilizadas en épocas de hambruna; las raíces, secas y pulverizadas, mezcladas con cereales, se usaban en la elaboración de pan.


No hay comentarios:

Publicar un comentario